La transición energética es crucial para un futuro sostenible, ya que actualmente, el sector energético causa la mayor parte de las emisiones de gases de efecto invernadero. Con el ritmo actual de calentamiento global, es fundamental abandonar los combustibles fósiles y desarrollar fuentes de energía renovables. Esta transición ayudará no solo a reducir la contaminación atmosférica, sino también a disminuir la dependencia de recursos finitos.
Prysmian Club en su artículo “2023 un año decisivo: expectativas y retos energéticos por cumplir” recalca los puntos clave que deben cumplir los países de la UE para lograr los objetivos marcados para 2023 acerca de las emisiones contaminantes.
Imagen: Web oficial de la Unión Europea
REPowerEU
Una de las necesidades clave es la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, juntamente con el desarrollo de las energías renovables en los principales sectores que más emisiones causan, como son la industria, el transporte, la edificación y la infraestructura energética. Concretamente, el plan REPowerEU para 2030 exige a los estados miembros:
- Más del doble del ahorro anual de energía en el período comprendido entre 2022 y 2030.
- Alcanzar el objetivo del 45 % de energías renovables.
España tiene un gran potencial para producir energía renovable, pero todavía hay un largo camino por recorrer para alcanzar la dependencia total de las fuentes de energía renovable.
NET ZERO: un reto muy ambicioso
El sector energético es la pieza clave para lograr combatir los efectos del cambio climático a tiempo. Por eso, los países de la UE se enfrentan al reto de transformar completamente la forma de producir, transportar y consumir energía si se quiere lograr el gran objetivo propuesto para 2050: emisiones netas cero a nivel mundial. Los estados deben actualizar los planes nacionales de energía y clima, para hacerlos más ambiciosos.
Tal como menciona Prysmian Club en su artículo, la electrificación, el hidrógeno verde y los combustibles sintéticos son las tres áreas clave para avanzar en la transición energética. Aunque el futuro se encara con perspectivas favorables, España aún tiene asignaturas pendientes para lograr la eficiencia energética.
